Grabado mitad acá y mitad en EEUU (otra vez los yanquis en todas partes, vio?), es uno de los últimos discos de Vicentico y Cía, que por estos días están volviendo a las canchas (vaya a saber por cuánto tiempo, sólo esperemos que no sea solamente una asquerosa movida movida comercial como la de Cerati y sus amiguitos).
Hay aquí ecos de sus primeras etapas ska, mezclados con aires de tango, jazz, candombe, bolero y rock pesado (cortesía del descontrolado de Minimal, que toca con ellos en este disco).
Se encuentran en el disco constantes alusiones al fútbol, pasión de muchos de los integrantes de los Cadillacs. Pero el rasgo más interesante del disco es la madurez que parecen haber alcanzado sus músicos, que ya no hablan de morir tocando ska (género al que respetamos muchísimo, pero ese no es el tema), si no que hablan de sus relaciones amorosas y/o amistosas y de la vida misma, siempre con un dejo de melancolía y nostalgia.
Los Cadillacs parecen tener un karma extraño: son en general todos muy buenos músicos y aquí funcionan en conjunto a la perfección, pero sus proyectos paralelos con otras bandas o solistas han resultado ser mediocres (tome un Cd de Flavio y La Mandinga y va a ver de lo que estoy hablando).
Hay aquí ecos de sus primeras etapas ska, mezclados con aires de tango, jazz, candombe, bolero y rock pesado (cortesía del descontrolado de Minimal, que toca con ellos en este disco).
Se encuentran en el disco constantes alusiones al fútbol, pasión de muchos de los integrantes de los Cadillacs. Pero el rasgo más interesante del disco es la madurez que parecen haber alcanzado sus músicos, que ya no hablan de morir tocando ska (género al que respetamos muchísimo, pero ese no es el tema), si no que hablan de sus relaciones amorosas y/o amistosas y de la vida misma, siempre con un dejo de melancolía y nostalgia.
Los Cadillacs parecen tener un karma extraño: son en general todos muy buenos músicos y aquí funcionan en conjunto a la perfección, pero sus proyectos paralelos con otras bandas o solistas han resultado ser mediocres (tome un Cd de Flavio y La Mandinga y va a ver de lo que estoy hablando).
4 comentarios:
me gusto me gusto, muy bien 10 vicente por poner a los fabulo y cortar un poco con tantas cosas ke nunca escuche
aver cuando me das el gusto y pones sublime, para todos los niños ska barriletes ke deben frecuentar este blog(??)
un beso, sigan asi, nunca cambien, el blog esta buenisimo, un beso para mi abuela de castelar y todos los ke me conocen
eh vile! qué buen cd la marcha; una lástima que la guerra de egos entre vicentico y minimal hayan acabado con el sonido. En fin, me gusta mucho el blog, una idea muy original y solidaria, ofreciendo cd's de calidad a la tribuna.
un abrazo!
Aunque no me gustan mucho, sin duda este y Fabulosos Calavera me resultan los mejores trabajos de los Cadillacs.
La madurez está, sin duda. Las composiciones logradas. Minimal. Las letras más interesantes. El abanico más colorido y "musical" (en un sentido muy personal de la palabra, claro; porque música, lo que se dice música, han grabado en todos los discos).
En fin, justo el otro día, para sacarme el mal trago de haber escuchado su última aberración (La Luz del Ritmo, 100% olvidable), le pegué una oída a algunos temas de estos álbumes (Los Condenaditos, Sábato, Surfer Calavera) y volví a recordarlos con un poco más de cariño.
Como anécdota inútil e intrascendente, comentar que me acerqué a los Fabulosos hace ya unos ocho años, cuando aún no conocía a Pez, y no registré a Minimal como el ser humano artísticamente íntegro e improstituible que hoy tanto aprecio. Recién un par de años después, cuando escuché a los peces por primera vez, entablé el link entre los "dos Minimales".
Aunque, claro, reducir el sonido cadillac de la época 97/99 al gordo de Huracán sería simplificar las cosas.
De yapa, comento que leí a un flaco amigo de un plomo del cuarteto decir que ya están grabando disco nuevo para marzo y que en pocos meses sale el DVD.
Y otra vez como comentario inútil, decir que escuché en vivo dos temas nuevos, que calculo que irán en el disco: uno es una pseudo-balada a la Nebbia que no está mal, y el otro es un pseudo-punk que no me gustó nada. En fin, ya oiremos...
El que me gustó mucho, de las últimas ediciones de Azione, es el de Minimal con Florencia Ruiz, Ese Impulso Superior. Imagino que ya lo habrán escuchado. Si no es así, lo recomiendo plenamente.
Saludos.
Justo mirando esto estaba pensando en cuánta gente no escuchó los dos primeros discos solistas de Flavio, en especial el segundo (El Marplatense) que tienen tantas reminiscencias preciosas a estas épocas... Y mirá vos lo que es que me encuentro con que tu reflexión final apunta a eso.
Pero no, caro amigo: no todo es mediocridad en la historia solista de los ex Cadillacs. Aquel gran disco de Flavio así lo testimonia y la Orquesta Jabalí puede ser otro caso también.
Que después se hayan entregado al poderoso señor Don Dinero, bueno, ese ya es otro tema. Pero en algún momento (como en este disco, en su antecesor y en los solistas de Flavio que comento) le tenían ganas a la música con "M" grande.
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